Una vez más sentí el impulso de ponerme a escribir cosas que seguramente nadie va leer, pero si lo hicieran no me molestaría. Es algo personal...
Últimamente me pasó algo, me ocurrió algo que dudaba que pudiera pasarme en mucho tiempo, y la verdad no entendí porque a mi. Yo, que me siento tan insignificante en comparación a la mayoría. Yo de entre tantas personas, tantas chicas para ser específica. Hasta me pareció gracioso y no pude evitar que mi autoestima subiera un par de veces. Seguí el curso de las cosas pero al final entendí que no es lo que quería ni lo que necesitaba. No era del modo que quería y esa persona no estaba dispuesta a esperar por mí, no lo culpo, yo tampoco lo hubiera hecho, al final de cuentas recibiría una respuesta negativa.
Mi desconfianza natural al mundo y las advertencias que recibí a lo largo de mi vida hicieron que este alerta, que sea atenta pero también discreta, en un principio hasta fui distinta a como soy en realidad. Mi error típico, como siempre eso solo resulto como un fraude de mi parte.
Pero aquí el tema es otro. Porque aún me sentía desgraciada cuando por fin (¡finalmente!) tenía la atención y el cariño de alguien que me procuraba. Tan egoísta, tan cínica... así fue como me sentí. Hasta que me di cuenta de algo.
Soy una idiota enamorada de la idea del amor. Y no se cuando me volví así.
Debió ser luego de consumir Disney toda mi infancia, rodeada de la idea de que los sueños se hacen realidad, suena tan gracioso. O tal vez fue luego de leer cantidades, no tan grandes pero considerables, de novelas románticas, donde el amor era lo que estaba en juego y era la cosa más importante en la cual la protagonista solía basar cada acción que realizaba. "Por amor".
Me di cuenta que quiero que mi vida sea algo así. No quiero simples experiencias, aunque tal vez sin notarlo las voy adquiriendo. Quiero cosas importantes, significativas para mí, y no debo buscarlas o forzarlas, solas llegarán en su debido momento. Si es que no vuelvo a rechazarlas, ja!
Oh bueno, eso fue cruel. Porque ni siquiera me siento culpable, es más... en el fondo no me interesa en lo absoluto, simplemente aprecio su trato hacia mí. Aunque jamás voy a comprenderlo, soy tan necia.
A veces pienso que no lo valgo, que no valgo nada que involucre una promesa o un acto en mi consideración. Viví tanto tiempo bajo ese pensamiento que ahora me es difícil desarraigarme de él.
Hubo un momento en mi vida en el que moría porque algo así me ocurriera, lo deseaba más que otra cosa, pero solo podía ser con alguien. Después vino la desilusión, la gran y maldita desilusión que muy dentro mío sigue doliendo. Espero el día en que pueda superarlo, pues ya debo estar en los recuerdos más vagos y sin sentido de esa otra persona.
Y cuando viene a ocurrirme, simplemente lo dejo pasar, yo y mis estúpidos y tan preciados sentimientos lo hemos dejado pasar, en busca de alguien que vuelva a hacer latir mi torpe corazón de manera necesitada y desbocada.
Uh, me volví tan dramática también, ¡mierda!. Si le dicen a alguien que leyeron esto de mi , lo negaré rotundamente, no lo duden.
Simplemente las cosas pasaron en un momento equivocado, lo lamento mucho si fui estúpida y desconsiderada, pero en este momento de mi vida tengo cosas que quiero disfrutar o que debo hacer, cosas nuevas que tampoco tuve antes y a las que debo prioridad si es que no quiero perderlas, y no quiero.
(hablando de eso... si no me voy a estudiar ya, perderé la maldita y aburrida materia.)
Retirándome~